C1: Inter de Milán lleva a Italia de vuelta a la final de la Champions League

El Inter de Milán, último club italiano en conquistar la Champions League en 2010, volvió a vencer al AC Milan (1-0), tras el 2-0 de la ida, para llevar de nuevo al país del Calcio a la final.

Rafael Leao, con quien contaban los rossoneri para cambiar las cosas, luchó por encontrar un espacio contra los compactos y disciplinados nerazzurri. Y Lautaro Martínez acertó (74º) para apagar sus últimas esperanzas en un partido cerrado y picado.
El Inter de Milán obviamente será el forastero en Estambul, el 10 de junio, contra el inmaculado Real Madrid con 14 coronaciones (el récord) o el hambriento Manchester City en busca de una primera corona.

Pero los nerazzurri, que no esperaban un curso así tras heredar al Bayern de Múnich y al FC Barcelona en la fase de grupos, intentarán hacer valer allí su carácter, que les bastó ante los rossoneri. Frente al FC Porto (1-0, 0-0) en los octavos y al Benfica (2-0, 3-3) en los cuartos, el Inter de Milán supo gestionar la ventaja del partido de ida para seguir corriendo hacia un posible cuarta coronación tras las de 1964, 1965 y 2010.

Si no tuvieran las armas para privar al Nápoles del scudetto, los nerazzurri pueden acabar la temporada con tres títulos ya que también jugarán la final de la Copa de Italia el 24 de mayo, ante la Fiorentina, tras haber ganado ya la Supercopa de Italia en enero, ya ante el AC Milán (3-0).

Leao al lado

Ante el Milan se toma una bonita revancha tras haber caído ante los rossoneri en la C1 durante sus dos enfrentamientos anteriores, en 2003 y 2005. Un año después de su título de campeón de Italia, Olivier Giroud, muy discreto, y sus compañeros les acaban la temporada con la moral baja, ya cuatro veces derrotado por el Inter en otros tantos partidos en 2023.

« El Inter mereció en los dos partidos, pero nuestro recorrido ha sido fantástico » en la C1, prefirió retener a la exleyenda del gran Milan, Paolo Maldini, ahora entrenador del club.

El ansiado regreso de Rafael Leao, por tanto, no habrá sido suficiente para descarrilar a un Inter confiado, que se mantiene en ocho victorias consecutivas. El portugués ha buscado durante mucho tiempo su sitio, empezando por perder un balón y yendo por abajo, aunque casi desbloquea el partido en una de sus raras aceleraciones, concluyó con un disparo lateral (38º).

Sin duda fue la mejor oportunidad de los rossoneri con la desaprovechada por Brahim Díaz, que pegó demasiado suave a un centro de Sandro Tonali, dejando a André Onana tumbado tranquilo (11º).

Turpin silbaba mucho

Inter, en su lugar, en general estaba esperando y viendo, decidido a « manejar » contrariamente a lo que su entrenador Simone Inzaghi anunció el día anterior.

En este partido comprometido, Clément Turpin fue durante mucho tiempo el francés más destacado en el campo, con nada menos que 22 faltas pitadas durante un primer tiempo entrecortado en el que el juego nunca cobró velocidad. El portero de los Blues Mike Maignan le dio competencia al estrenar una nueva parada milagrosa en un desvío de cabeza de Edin Dzeko justo antes del descanso (41º), mientras que el Inter se empeñaba por fin.

Mismo partido cerrado y misma impotencia de los atacantes milaneses en la segunda mitad. Una impotencia que se convirtió en frustración cuando el Inter de Milán dobló el partido gracias al tenso disparo al primer palo de Lautaro Martínez que Mike Maignan solo pudo tocar (74º).
« Hicimos un gran trabajo. Si tienes un grupo unido, todos van en la misma dirección, todo es más fácil », se regocijó el argentino ‘Toro’.

Martínez puede soñar con levantar la Champions League a los pocos meses de conquistar el Mundial. Maignan y Milan tendrán que dar latigazos para conseguir el cuarto puesto de la liga, para aspirar a encontrar el C1 la próxima temporada.

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