Hajj 1444: SM el Rey llama a los peregrinos marroquíes a ser dignos embajadores de su patria y abanderados de su civilización milenaria y de su identidad
En un mensaje dirigido el viernes a los peregrinos marroquíes que viajan a los Santos Lugares del Islam en el año 1444 H, el Soberano también exhortó a los peregrinos marroquíes a ser « embajadores de vuestra religión en una gran temporada que encarna la fraternidad islámica, la moderación en la creencia y el comportamiento, desterrando toda manifestación de extremismo y exageración, y todo cuanto causa discordia y agresión ».
Su Majestad el Rey, Amir Al Muminin, también invitó a los peregrinos a mostrar piedad, « la mejor provisión para este auspicioso viaje ».
« Muestren también la buena conducta durante esta gran temporada en la que los musulmanes deben estar atentos a dos grandes asuntos complementarios; el primero de los cuales es vuestra unificación del Dios único, y el segundo es la materialización de vuestra unidad y el aferramiento a su sólida defensa », afirmó SM el Rey en este mensaje, cuya lectura fue dada por el ministro de Habices y Asuntos Islámicos, Ahmed Toufiq, con motivo de la salida del primer contingente de peregrinos del aeropuerto de Rabat-Salé.
El Soberano subrayó que « en Islam ha establecido el pilar de la peregrinación sobre la base de la materialización de la igualdad entre los creyentes al hallarse todos reunidos en un solo espacio en la Casa Sagrada, en Mina y Arafat, ataviados con el atuendo del ihram, de modo que no haya ninguna distinción entre la gente, así como ninguna disparidad de rangos ni de riquezas entre las personas en este lugar ».
SM el Rey recordó también a los peregrinos que su estancia en los Santos Lugares exige la máxima disciplina y la más sincera observancia de las obligaciones y reglas canónicas de la peregrinación.
« A este respecto, No cabe duda de que os habéis informado de la mejor manera sobre este asunto, asimilando lo que sobre este tema os han prodigado nuestros ejemplares alfaquíes y ulemas, varones y hembras, con el empeño de Nuestro ministro de Habices y Asuntos Islámicos de cumplir con su deber en este asunto », subrayó el Amir Al-Muminin.
Asimismo, Su Majestad el Rey instó a los peregrinos marroquíes a dedicar todo su tiempo, dondequiera que se encuentren, a invocar a Dios e implorar Su perdón, a multiplicar los actos de devoción para entrar en la buena gracia del Señor, a hacer gala de elevación moral para trascender todo tipo de trivialidades y a abstenerse de cualquier antagonismo que pueda inclinarles a un comportamiento transgresor.
« Además, benditos peregrinos, procurad realizar vuestros rituales respetando las enseñanzas de vuestra religión y formulando sinceras jaculatorias a Dios el Altísimo para lograr el objetivo supremo por el cual la peregrinación fue prescita, que no es otro sino el de merecer el perdón y la gran recompensa que Dios Todopoderoso prometió a sus súbditos en relación con este precepto y como bien dijo nuestro Profeta Elegido, la paz sea con él », escribió el Soberano.
SM el Rey, Amir Al-Muminin, invitó a los peregrinos a respetar estrictamente las medidas organizativas adoptadas por las autoridades competentes del Reino hermano de Arabia Saudí, que se han preocupado de que los huéspedes del Señor gocen de condiciones ideales de tranquilidad, « con el fin de que la temporada del Hajj se lleve a cabo en el seno de la disciplina y la seguridad, bajo las elevadas instrucciones de Nuestro queridísimo Hermano, Servidor de los Dos Santos Lugares, el Rey Salman bin Abdulaziz, Soberano del hermano Reino de Arabia Saudí, Dios le dé salud y larga vida, y le aporte el apoyo de su Príncipe Heredero, Nuestro Queridísimo Hermano, Su Alteza Real el Príncipe Muhammad bin Salman, Primer Ministro, Dios lo proteja, le dé larga vida y conduzca sus pasos hacia el éxito ».
El Soberano aprovechó la ocasión para expresar su profunda consideración y saludar calurosamente las relaciones fraternales que unen a los dos Reinos y a los dos pueblos hermanos.
SM el Rey exhortó a los peregrinos marroquíes a no olvidarse de formular « votos por vuestro Rey, que vela por vuestra patria y vuestra seguridad, esperando que Dios nos proporcione su ayuda y éxito en todas nuestras iniciativas de desarrollo y nuestros constantes esfuerzos por preservar la soberanía y unidad de Marruecos, y que nuestro querido país, Marruecos, siga realizando la dignidad a nuestros ciudadanos y apoyando los valores de nuestros hermanos en los países islámicos y africanos, por el camino del progreso, la unidad y el desarrollo.
« Rezad también para Que Nuestro Heredero, Su Alteza Real el Príncipe Mulay Al-Hassan, así como todos los miembros de nuestra honorable Familia Real, sean siempre una fuente de alegría y satisfacción, y que Dios Todopoderoso rodee con su perdón y bendición a Nuestro Venerado Abuelo, Su Majestad el Rey Mohammed V, y a Nuestro Augusto Padre, Su Majestad el Rey Hassan II, aportándoles la mejor de las recompensas por los servicios que prestaron a favor de la liberación de Marruecos, la construcción de su Estado y la preservación de su unidad nacional », subrayó el Soberano.