Sáhara marroquí: Hilale desacredita la instrumentalización por Argelia de su mandato en el Consejo de Seguridad
«El Reino de Marruecos lamenta que la sesión informativa organizada por el Consejo de Seguridad el 30 de mayo de 2024, sobre la situación de los refugiados y desplazados en el mundo, haya sido utilizada por el embajador, representante permanente de Argelia, Amar Bendjama, en su calidad de miembro no permanente del Consejo, para hacer valer la posición sesgada de su país sobre la cuestión del Sáhara marroquí, así como sobre la situación desastrosa, que caracteriza desgraciadamente la vida cotidiana de los secuestrados en los campamentos de Tinduf en Argelia», subrayó Hilale en esta carta.
Señaló que en lugar de abordar las ocho situaciones humanitarias mencionadas por el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, durante su sesión informativa, el embajador argelino fue el único de los miembros del Consejo que se centró en la cuestión del Sáhara marroquí, a pesar de que Grandi no la mencionó, añadiendo que el diplomático argelino se ha distinguido una vez más por demostrar que Argelia es efectivamente la parte principal en este diferendo regional, que creó y mantiene en violación de las normas de buena vecindad y los fundamentos jurídicos, históricos y políticos de la marroquidad del Sáhara.
En respuesta a las falsedades divulgadas por el embajador argelino durante esta reunión, restringida a los miembros del Consejo de Seguridad, el embajador Hilale precisó que «Argelia no acoge en modo alguno a las poblaciones de los campamentos de Tinduf. Al contrario, las retiene contra su voluntad desde hace más de cinco décadas. Los utiliza como instrumentos en su política de hostilidad constante contra la integridad territorial del Reino de Marruecos».
«El embajador argelino afirma que +estas poblaciones esperan una acción de la comunidad internacional, y más concretamente de este Consejo, que les permita regresar voluntariamente a su tierra+”. Sin embargo, la realidad es bien distinta», lamentó el diplomático marroquí.
«Argelia les niega el derecho a regresar a su madre patria, Marruecos, a pesar de que este derecho está garantizado por el derecho internacional humanitario, en particular por la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951», explicó Hilale, agregando que Argelia se opone categóricamente al censo de estas personas, en flagrante violación de sus obligaciones como Estado Parte de la Convención de 1951 y de todas las resoluciones del Consejo de Seguridad desde 2011.
El embajador marroquí continuó diciendo que Argelia «lleva medio siglo violando el mandato estatutario del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), al impedirle censar a estas personas, como hace en todas las situaciones de refugiados en el mundo».
Añadió que Argelia niega a las personas secuestradas en los campamentos de Tinduf la posibilidad de elegir entre las tres soluciones duraderas que les ofrece el derecho internacional humanitario, a saber, el regreso voluntario, la integración local o el reasentamiento en un tercer país, señalando que «las personas que se encuentran en los campamentos de Tinduf tienen prohibido salir de estos campamentos, que están rodeados por varios cordones de seguridad tripulados por el ejército y los servicios argelinos, además de las milicias armadas del “polisario”».
En la misma línea, Hilale subrayó que Argelia «politiza desgraciadamente el derecho internacional humanitario al condicionar el retorno de las personas de los campamentos de Tinduf al Sáhara marroquí, a un pretendido referéndum». Explicó que «el retorno voluntario, como otras soluciones duraderas, es una exigencia humanitaria que no puede condicionarse a ninguna otra consideración».
«El pretendido referéndum al que se refiere el embajador argelino está realmente muerto y enterrado por el Consejo de Seguridad y el Secretario General de Naciones Unidas. El embajador argelino finge ignorar que ninguna resolución del Consejo de Seguridad hace la menor referencia a un supuesto referéndum, y no lo hace desde hace más de dos décadas », recordó el diplomático marroquí.
Insistió en que la única solución a este diferendo regional es la iniciativa marroquí de autonomía, en el marco de la soberanía y la integridad territorial del Reino de Marruecos, precisando que esta iniciativa ha sido considerada como una solución seria y creíble en todas las resoluciones del Consejo de Seguridad desde 2007.
«En todas sus resoluciones, el Consejo de Seguridad aboga por una solución política realista, pragmática, duradera y de compromiso», añadió, destacando que en su última resolución 2703 del 30 de octubre de 2023, el Consejo llamó a Argelia, principal parte en este diferendo, a participar en la tercera mesa redonda, en el marco del proceso político exclusivamente de la ONU. «Desgraciadamente, Argel se niega a hacerlo, impidiendo así la reanudación de este proceso político».
«La pretensión del embajador argelino de que +su país no escatima esfuerzos para satisfacer las necesidades de los refugiados saharauis+ es pura mentira», sostuvo Hilale, detallando que Argelia «viola los derechos más elementales de estas personas e incluso les priva de la ayuda humanitaria internacional, que desvían sistemáticamente los responsables del grupo separatista armado +Polisario+ y los responsables de la Media Luna Roja argelina».
Estas malversaciones sistemáticas, continuó Hilale, habían sido confirmadas, con pruebas, por la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF) de la Unión Europea, así como por el Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas, en su informe de enero de 2023 titulado «Evaluation of Algeria WFP Interim Country Strategic Plan 2019-2022».
El embajador Hilale también señaló que los campamentos de Tinduf están militarizados, en violación del derecho internacional humanitario, que exige el mantenimiento y la preservación del carácter civil de los campamentos de refugiados en todo el mundo.
Argelia, «que siempre se regodea del respeto de su soberanía, delega sin embargo sus prerrogativas soberanas a un grupo armado vinculado al terrorismo +polisario+, al cederle una parte de su territorio, los campamentos de Tinduf. Esto ha sido condenado firmemente por el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas y otros organismos internacionales y de la ONU, por ser contrario al derecho internacional », afirmó.
Hilale concluyó que el Reino de Marruecos espera sinceramente que el embajador argelino se dedique más a las crisis urgentes de paz y seguridad que preocupan a la comunidad internacional que a promover la agenda política de su país contra su vecino, Marruecos.
La carta del embajador Hilale al presidente y a los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU será publicada como documento oficial de este órgano de la ONU.