Moroccans shout slogans during a demonstration against economic marginalisation on January 19, 2018, in the northeastern city of Jerada, 60 kilometres southwest of Oujda. – The residents of the former mining town demonstrated to call for « jobs and development » after the accidental death of two brothers in a disused mine sparked mass protests. (Photo by FADEL SENNA / AFP) (Photo credit should read FADEL SENNA/AFP via Getty Images)
En un movimiento que subraya la creciente crisis en la ciudad de Jerada, la diputada del Partido Socialista Unificado, Nabila Mounib, ha dirigido una carta al Primer Ministro a través del Presidente de la Cámara de Representantes. En su misiva, planteó una pregunta oral sobre el agravamiento del desempleo y la falta de oportunidades laborales para los habitantes de la ciudad, así como sobre el aumento alarmante en el número de víctimas de los pozos de carbón, conocidos localmente como “sandriates”.
Según la diputada, estos pozos, que se han convertido en un símbolo del sufrimiento de los habitantes de Jerada, siguen cobrando la vida de los jóvenes que, tras el cierre de las minas oficiales, se ven obligados a trabajar en condiciones inseguras.
Mounib también subrayó que la formación de cooperativas para emplear a los jóvenes debería haberles brindado la oportunidad de una vida digna. Sin embargo, la ausencia de condiciones de seguridad en estas cooperativas ha llevado a un aumento en el número de víctimas.
La ciudad ha perdido recientemente a dos jóvenes en apenas cuatro días, lo que refleja la gravedad de la situación.
Mientras continúan estas tragedias, la diputada señala en su carta que se están gastando grandes sumas de dinero sin un impacto tangible en la mejora de las condiciones en la región o en la creación de empleos seguros para los jóvenes.
En lugar de que las riquezas subterráneas de la región sean una fuente de desarrollo, Jerada sigue sufriendo tasas alarmantes de desempleo, a pesar de los movimientos populares pacíficos que han exigido legítimamente una mejora de las condiciones económicas y sociales.
Mounib concluyó su carta preguntando al Primer Ministro sobre los programas gubernamentales relacionados con el empleo y la lucha contra el desempleo en Jerada en particular y en la región del Oriental en general, enfatizando el derecho de esta región a la creación de empleos y al desarrollo que necesita.
Este paso vuelve a abrir el debate sobre la responsabilidad del gobierno de responder a las demandas de los habitantes de Jerada y mejorar sus condiciones de vida ante el deterioro de la situación económica y social de la región.