El barrio Rkiba, en la comuna de Bhalil (provincia de Sefrou), se vio sacudido la mañana del lunes por un terrible asesinato que cobró la vida de un hombre de unos cincuenta años, miembro de la comunidad marroquí residente en Francia.
Según testigos, la esposa de la víctima, madre de sus hijos, presuntamente lo apuñaló mortalmente en el cuello con un arma blanca poco después de que él regresara de la oración del alba. Posteriormente, habría intentado suicidarse ingiriendo una sustancia tóxica y provocándose heridas.
Los vecinos, profundamente impactados, describieron a la familia como respetada y conocida por su buena reputación, lo que genera muchas preguntas sobre los verdaderos motivos detrás de esta tragedia.
Alertadas por un miembro de la familia, las fuerzas de la Gendarmería Real y la policía científica acudieron al lugar, detuvieron a la sospechosa y la trasladaron al hospital bajo custodia policial.
El cuerpo de la víctima fue llevado a la morgue para la autopsia, bajo la supervisión de la fiscalía competente, con el fin de esclarecer las circunstancias exactas del crimen.

