Ante el reciente anuncio de varias escuelas privadas sobre el aumento de las tarifas escolares para el próximo año, muchos padres están preocupados. Esta decisión, presentada por los establecimientos como esencial para su supervivencia económica, reaviva el debate sobre la financiación de la educación y el papel del Estado.
Desde el comienzo de las vacaciones escolares, los padres deben preparar financieramente el nuevo año escolar. Este período, tradicionalmente dedicado al descanso, se convierte en un momento de planificación presupuestaria, especialmente tras los anuncios de aumento de las tarifas escolares. Las familias deben equilibrar el disfrute de sus vacaciones con la anticipación de los costos crecientes del próximo año escolar.
Si las escuelas públicas en Marruecos recibieran la atención y el presupuesto necesarios, las familias no estarían a merced de las escuelas privadas. Actualmente, ni el ministerio ni ninguna otra autoridad controla las tarifas escolares de los establecimientos privados, exponiendo a los padres a aumentos imprevisibles y a menudo significativos. Un sistema de escuelas públicas bien financiado ofrecería una alternativa sólida, reduciendo así la dependencia de las familias en las escuelas privadas.