Argelia: Un poder ahogado por su propio régimen
Cuando el periodista y analista político Fouad Gandoul decidió hablar sobre Argelia en su artículo publicado el 23 de enero de 2025 en el diario belga flamenco “De Tijd”, no necesitó mucha imaginación. Los hechos hablan por sí solos: un país con todo el potencial para ser una potencia regional, pero atrapado en un ciclo interminable de represión y tensiones. Un espectáculo financiado con los ingresos del petróleo, con un guion escrito por generales que solo saben avanzar sin rumbo.
Gandoul describe un sistema confuso y estancado, donde los militares tienen el poder absoluto y donde no se tolera ninguna voz disidente.
Mientras tanto, los medios oficiales no hacen más que repetir el mismo discurso: “Marruecos es el enemigo, estamos rodeados de conspiraciones, los traidores están en todas partes”. Pero esta obsesión es costosa, ya que las crisis económicas y sociales crecen como una bola de nieve imposible de detener.
La economía argelina depende exclusivamente del petróleo y el gas. Cuando los precios suben, el régimen se siente invulnerable; cuando bajan, recurre al discurso de la conspiración externa.
Con un 30% de desempleo juvenil, el país está al borde del estallido. Sin embargo, en lugar de invertir en el futuro de su juventud, el régimen gasta miles de millones en armas y maniobras militares. Para los que no pueden esperar, la única opción es huir hacia Europa, incluso arriesgando la vida en el mar.
Argelia se presenta como un garante de la estabilidad, pero en realidad es uno de los principales focos de inestabilidad: tensiones fronterizas con Marruecos, movimientos militares sin justificación y represión interna extrema. Cualquier protesta es respondida con prisión, vigilancia y tortura.
Para Gandoul, Argelia baila al borde del caos, sin reformas reales ni soluciones, solo una desesperada estrategia para alargar la vida de un régimen que teme más a su propio pueblo que a sus adversarios.
La verdadera pregunta ya no es si habrá un cambio, sino cuánto tiempo más podrá resistir este sistema antes de colapsar.