La distinción concedida a Azoulay es un reconocimiento a los esfuerzos de Marruecos en el proceso de paz, bajo el liderazgo de Su Majestad el Rey (Consejero de la Presidencia Palestina)

En una declaración a la MAP, Agha dijo que Azoulay cuenta con un largo y honorable historial en el establecimiento de una paz justa entre palestinos e israelíes, y entre árabes y judíos en general, como parte de las posiciones honorables del Reino de Marruecos en este ámbito.

« André Azoulay pertenece a la misma escuela que Shimon Peres y otras ilustres figuras mundiales que abogaron por el surgimiento de un nuevo Oriente Medio, en el que las comunidades religiosas y raciales puedan coexistir con total seguridad », añadió, subrayando que el consejero de SM el Rey es una de las personalidades que creyó firmemente en la solución de los dos Estados y la defendió con fervor.

A este respecto, Agha recordó el papel desempeñado por el difunto Su Majestad Hassan II en la búsqueda de canales de contacto y comunicación entre árabes e israelíes, subrayando que el difunto Soberano estuvo en la vanguardia de los líderes que abogaron por el diálogo político para construir una paz justa y global en la región.

Y Su Majestad el Rey Mohammed VI sigue desempeñando con la misma sabiduría este papel para relanzar el proceso de paz sobre la base de la solución de los dos Estados, conviviendo en paz y seguridad, añadió el consejero de la Presidencia palestina.

El domingo, el Presidente del Estado de Israel, Isaac Herzog, entregó la Medalla de Honor Presidencial al consejero de SM el Rey, André Azoulay, conocido por su compromiso histórico en favor de la paz entre israelíes y palestinos, y de una solución de dos Estados en la que las palabras soberanía, dignidad y justicia se conjugarían de la misma manera y con las mismas exigencias para ambos pueblos.

Entre los antiguos galardonados con la Medalla de Honor Presidencial israelí figuran los presidentes estadounidenses Joe Biden, Bill Clinton y Barack Obama, así como otras eminentes personalidades como Henry Kissinger y el Premio Nobel de la Paz Elie Wiesel.